Turista escapista: un nuevo segmento viajero que busca escabullirse de su vida cotidiana para encontrarse nuevamente
Las nuevas generaciones traen consigo distintos tipos de turismo, y por ende cada segmento requiere una atención más personalizada. Uno en particular que nació hace algunos años y que está tomando fuerza es el “escapista” o “escapista de destino”.
Una característica importante de este tipo de turista es que no solo busca alejarse de su vida cotidiana por un corto periodo de tiempo, sino que al preferir destinos cercanos a su vivienda contribuyen a impulsar el turismo local.
El escapista es un turista que viaja para reducir el estrés que produce la vida cotidiana, busca destinos que le permitan estar en contacto con la naturaleza, reencontrarse consigo mismo y cargar energías.
Este viajero opta por alternativas cercanas a su lugar de residencia, debido a que requiere hacer algo diferente que lo aparte momentáneamente de su rutina diaria, durante un fin de semana o en alguna vacación corta.
Otra de las características de este turista es que está interesado en desarrollar actividades al aire libre como caminatas, observación de aves, visita a cataratas, puentes colgantes, rafting, rappel, cabalgata, entre otros.
Finalmente, el escapista busca un hospedaje que le brinde gran variedad de servicios como alimentación, SPA, experiencias; así como, espacios de relajación en familia como piscinas y termales por sus beneficios en la salud.
Ante este perfil varios hoteles trabajan en ofrecer cada vez mejores experiencias y cumplir con creces la expectativa de estos huéspedes. Uno es el hotel Arenal Manoa en La Fortuna de San Carlos, que se ha especializado en estos perfiles, por su cercanía con la capital, sus vistas únicas al volcán arenal y ofrecer aguas termales naturales.
Alejandro Rojas, encargado de publicidad y mercadeo del hotel Arenal Manoa explica que “en nuestro caso hemos trabajado en ofrecer a este turista los servicios que requiere y busca. Es por ello, que el hotel recientemente remodelo el spa y aunado a sus jacuzzis de agua termal natural ofrecen un retiro encantador y sereno al huésped, donde disfrutará de una variedad de tratamientos de lujo diseñados para relajarse, refrescarse y rejuvenecerse”.
“El spa está ubicado junto a un río tranquilo, donde el sonido del agua y el canto de los pájaros crean un ambiente pacífico que le ayudará al visitante a relajarse y a disfrutar del momento. En cuanto a los tratamientos que ofrece esta nueva área del hotel se encuentran: masajes, envolturas corporales, exfoliaciones corporales, faciales”, agregó Rojas.
En cuanto a los tours, el hotel cuenta con una amplia gama como por ejemplo puentes colgantes, observación de aves, caminata nocturna, caminata de perezosos, rafting, rappel, y otros.
Otro caso es El Silencio Lodge, ubicado en Bajos del Toro, en Alajuela, a una hora y media de San José.
Jeannette Arquín human resources director del hotel señala que “este tipo de turismo cada día gana más adeptos y en los próximos años seguirá en aumento. Tenemos viajeros que nos eligen para disfrutar del yoga en contacto con la naturaleza, de las caminatas en medio del bosque, de nuestros tratamientos de Sonidoterapia y por nuestro novedoso tratamiento de facial Oxigeneo, el cual consiste en rejuvenecimiento facial, con la aplicación de Oxi Pod en rostro para estimular la circulación e hidratar la piel.
Además, el hotel cuenta con experiencias que se diferencian del resto de hoteles del país como por ejemplo Mystic Hike, Aventure Park, Mountain Biking, Gorrion River Fishing, wine tasting, night walk, entre otros.
