Embrujar al cliente al momento de su ingreso, parece ser la fórmula mágica de este restaurante. Con una entrada llena de árboles y plantas, en medio de un espeso bosque lluvioso secundario en las alturas de Monteverde, cualquiera podría darse por satisfecho. Pero como no es así, se hace necesario adentrarse en la aventura gastronómica que ofrece el Restaurante Don Miguel.
Este lugar nació hace 10 años como respuesta a una necesidad del hotel Finca Valverde´s. No obstante, para suerte de los que no se hospedan en ese lugar, también está abierto al público en general.
Ronny Valverde, administrador y propietario, explica que su restaurante ha pasado por un proceso evolutivo, en donde han superado muchas etapas. Primero ofrecían un servicio de bed and breakfast. Luego se abrió para almuerzos y después se ofreció cena, pero este crecimiento no ha sido solamente del negocio sino también de los empleados.
Empezamos primero con el hotel y luego nos dimos cuenta que necesitábamos un restaurante para los turistas, entonces empezamos con algo pequeño como para 20 personas. Todo era comida tradicional. La primera cocinera fue mi mamá, Anita Ramírez, y aunque ya está retirada, de vez en cuando viene a supervisar a las cocineras.
Valverde recuerda con nostalgia, como hace diez años el menú era muy básico, consistía más que todo en comida típica costarricense. Pero el tiempo se ha encargado de perfeccionarlo poco a poco, ahora ofrece desayunos tradicionales, en el almuerzo sirven platos más rápidos como emparedados, casados, arroz con pollo, con camarón, a la marinera, cantonés, y la cena es mas formal con recortes de lomito, pescado, filete mignon, cordon blue, variedad en pastas y otras especialidades para complacer los gustos mas exigentes.
Aunque el restaurante está abierto al público, la mayoría de nuestros clientes son del hotel. Lo que más atendemos son españoles e italianos que son buenos conocedores de la cocina y hasta el momento todos han salido satisfechos.
Valverde comentó que parte del éxito de su restaurante se debe a que son muy estrictos con la materia prima que utilizan, la manipulación de los alimentos y la capacitación del personal.
Si utilizamos productos frescos entonces sabemos que la comida va a ser de la mejor calidad. Los cocineros han recibido capacitaciones, por ejemplo en meses pasados participaron en el seminario que organizó la revista Apetito. En cuanto a manipulación de alimentos hemos tenido mucho apoyo del INA, los empleados aprovechan cualquier oportunidad para actualizarse, aunque ninguno es graduado del Cordon Blue de París, tienen buen gusto por la comida.
No solo de pan…
Pero la buena comida no es el único ingrediente para el éxito de este lugar, pues si de excelente atención se trata los Valverde son especialistas. Una forma de lograr el calor familiar que se respira en el restaurante es por medio de una buena relación con sus empleados.
Siempre me pregunto qué motiva al ser humano, creo que a la gente le gusta estar en un buen ambiente de trabajo, a nadie le gusta que le anden buscando errores, sino que le den confianza. Es importante que se sientan valorados que no perciban que vienen sólo por el salario.
Y ese mismo respeto que sienten por sus empleados lo transmiten a cada uno de sus clientes, a quienes procuran atender de la forma más personalizada y atenta.
Lo más importante es trabajar con ganas y estar interesado en lo que el cliente quiere, porque si uno trata de atender a alguien nada más para que le pague la cuenta y olvidarlo sin importar lo que piense, esta perdiendo puntos. Yo creo que uno debe tratar siempre de darles lo mejor porque si ellos deciden venir a gastar su tiempo y su dinero en nuestro hotel o restaurante hay que esforzarse al máximo para agradarles.
Sin tregua
A pesar de todo lo que han logrado hasta ahora, estos empresarios no descansan. Su próximo proyecto es montar un bar que sirva como complemento del restaurante y ofrecer un servicio más completo, para complacer aun más a su público.
Valverde comentó que este plan está muy avanzado y que esperan tenerlo listo para finales de este año.
Necesitamos un bar para apoyar al restaurante, porque mucha gente no viene por una cena completa. Lo que más nos interesa es poder ofrecer un mejor servicio y de ser posible abrir en jornada continua, eso porque nuestros clientes lo han pedido. Somos conscientes de que nos debemos a ellos y siempre estamos abiertos a comentarios para ver que cosas hay que mejorar.
Un detalle muy importante es que todas las construcciones que han realizado hasta el momento, así como las que planean levantar están en armonía con el medio, puesto que tienen como propósito provocar el mínimo impacto ambiental.
Tratamos de construir en armonía con la naturaleza. Se cortó el mínimo de árboles para construir. Aunque siempre se da un impacto porque no es lo mismo que esté solamente el bosque a que esté el hotel. Sin embargo, se hace el esfuerzo. Nos preocupamos por el tratamiento de aguas residuales, utilizamos jabones biodegradables, tratamos de reciclar basura y participamos en los programas de reciclaje de Monteverde.
Valverde comentó que hay una premio para los hoteles en el cual en vez de estrellas reciben hojas, y que este año esperan conseguir aunque sea una rama. A
