la que se puede encontrar desde un tatuaje hasta un fino licor, eso sí la
mayoría de los productos son de origen asiático.
En estos años su principal propuesta ha sido ser un embajador de la cultura
oriental y asegura que lo más difícil ha sido romper la barrera de los
prejuicios. Aquí se tiene una imagen incorrecta de la cultura china, creen
que la comida es poco saludable, cuando es todo lo contrario. Una manera práctica
de cambiar esta mentalidad ha sido por medio de la distribución de recetarios y
las actividades de degustación que realizan en diferentes lugares, algo que
promueve el consumo de sus productos al tiempo que permite un acercamiento
directo con posibles clientes.
Uno de sus aliados en este camino ha sido la globalización, cada día la
gente está más dispuesta a probar cosas nuevas, como ahora viajan más, tienen
más contacto con otras culturas y por eso son más abiertos frente a lo nuevo o
lo diferente.
Pero la globalización también trae otras consecuencias, y es donde entran
los productos falsificados que según Fung, han invadido el mercado nacional. Para
combatir este problema se han visto obligados a etiquetar sus productos con la
marca Ancyfer, de manera que pueden garantizar la calidad de los artículos que
distribuyen.