Analizamos el mercado, las tendencias y las preferencias de los destilados en Costa Rica. Por Francesca Chinchilla para Apetito
El mercado de destilados en Costa Rica enfrenta un año retador y con cierto nivel de incertidumbre, ya que la pandemia, el conflicto que inició hace casi un año entre Ucrania y Rusia y la economía del país, que se proyecta por debajo de los niveles de los últimos dos años, ha tenido un impacto sobre la forma de consumir de los costarricenses y el sector turístico, que es muy relevante en la industria de los destilados.
Actualmente, y propiciado por las restricciones por la pandemia, los gustos y preferencias de los consumidores de alcohol cambiaron considerablemente, especialmente en la población menor de 30 años. Ahora, los destilados están superando a las cervezas en supremacía de personas jóvenes en Costa Rica.
Incluso, en la pandemia el nivel de consumo aumentó y las apuestas se fueron incrementando hacia productos más premium, que antes de esta no se consumían por un tema de costos. Las personas no solían atreverse y consumían productos clásicos como el ron y whisky. “Ahora la gente se está atreviendo a innovar”, contó Pablo García, gerente de Habla Bebidas.
El ascenso en la venta de destilados de alcohol ha sido impulsado en los últimos años por el resurgimiento de la cultura de los cócteles, incluida la creciente popularidad de los tequilas y el tradicional Whisky, de acuerdo a Guilhem Maury, gerente de mercadeo de Grupo Pampa.
“Los retos para este 2023 es volver un poco a recuperar lo que se perdió por el tema de la pandemia y apostar a la innovación y las tendencias de consumo. Nosotros hemos notado que las tendencias de consumo han venido creciendo muchísimo en el consumo de Ginebra, Mezcales; uno que otro tequila por ahí; los espumantes han ido cambiando. Aparecen más en combinación para coctelería, en formatos strichs como a que a eso va la tendencia”, comentó Maury.
En términos generales, las tendencias se mantienen en los últimos años y apuntan al desarrollo de la coctelería.
De acuerdo con el García de Habla Bebidas, mezclar diferentes tipos de licores y de sabores es una inclinación que se viene consolidando año tras año. Desde los tradicionales bares, que han hecho un gran trabajo tanto en el Gran Área Metropolitana (GAM), como en zonas turísticas; hasta los consumidores finales que desde la pandemia han mostrado disfrutar de este tipo de consumo, que además es bastante delicioso.
“Puntualmente, se vale mencionar que algunos destilados van a mantener un crecimiento importante. En efecto, los licores a base de agave están conquistando cada vez más el paladar de los costarricenses, tanto el tequila como el mezcal. También la ginebra, que sigue ganando terreno a través del famoso Gin Tonic. El consumidor disfruta hacerles twist a sus cócteles probando diferentes tipos de ginebra y así tener experiencias variadas”, subrayó.
Por otro lado, otra tendencia que está ganando terreno es el Aperol Spritz, que se mantiene como un Best Seller en nuestro país. El licor italiano, con su tono anaranjado, sus notas cítricas y su sabor más dulce que otros bitter, es una opción muy adaptada para refrescarse y compartir con amigos o familia.
Según García, muchos comercios, bares y hoteles, están intentando incursionar en Ginebra y mezcales. Además, han ingresado muchísimos sabores de mezcales, que al igual que la ginebra, vienen las clásicas y saborizados.
“Hay muchos cambios en cuanto a coctelería, que es la tendencia actual. Los jóvenes están modificando el consumo, ya que están apostando al tema del vino y al producto destilado, para desplazar un poco la cerveza”, detalló.
Los consumidores se han ido sofisticando en cuanto a sabores. Ahora están interesados en probar nuevos destilados, cócteles y esta tendencia la están adecuando los bares y restaurantes, que han ampliado su menú para ofrecer opciones elaboradas, trabajadas y muy bien pensadas.
También cabe subrayar que el consumo de cócteles no es limitado y exclusivo para comercios fuera del hogar, ya que las personas se están atreviendo a realizar sus propias creaciones con el auge de redes sociales como Tik Tok.
“En efecto, el consumidor no solamente quiere probar cócteles, también los quiere hacer el mismo y personalizarlos. La crisis del COVID-19 nos ha enseñado a mejorar nuestra capacidad y hemos aprendido a ser buenos anfitriones, ya que un cóctel bien hecho, es una excelente forma de satisfacer, y lucirse con los invitados”, dijo.
El incremento no solo se ha elevado en destilados para el uso de coctelería, porque resalta que se ha notado un incremento en el consumo de los hard Seltzer, sobre todo los que son bajos en alcohol y en azúcar, que logran seducir cada vez más consumidores, especialmente jóvenes que están enfocados en un estilo de vida saludable.
En Habla Bebidas están importando whisky saborizado con mantequilla de maní y es un producto que está teniendo un auge en el país.
También, tienen un destilado que se llama Cas de Luz, a base de cas, una fruta autóctona de Costa Rica.
“Sumado a la mantequilla de maní y el de cas, los amigos de la competencia están con otro que es a base de uchuvas. Entonces todas esas tendencias van atrayendo a consumidores nuevos y la gente quiere atreverse porque están un poco cansados y saturados de lo mismo de siempre”, afirmó García.
A pesar de que la cerveza se sigue tomando mucho en el país, el mercado de destilería ha crecido en el ámbito de la coctelería y mezclas. Es por eso que las empresas están apostando a Ginebra y las activaciones en torno a este destilado.
Tradicionalmente, la ginebra se combina con frutos rojos, secos y con frutas como naranja, pero pueden existir otras variaciones.
“El consumidor busca nuevas cosas y los mercados cambian. Las tendencias se arrastran desde Europa o Estados Unidos y esto principalmente es por la gente joven, que está muy metida en el tema de la ginebra y el tema de los mezcales y tequila”, afirmó.
García concluye que además de los cócteles, el mercado de mezclas ha ido en crecimiento, ya que es una opción fácil, rápida y deliciosa para agregar al destilado.