La Organización Mundial de la Salud estima que millones de personas en el mundo padecen enfermedades causadas por la contaminación de alimentos. En Estados Unidos las intoxicaciones producidas por comida causan la muerte de hasta 3.900 personas al año y provoca que otros cientos se enfermen gravemente.
Costa Rica no es la excepción a este problema y aunque los estándares de calidad en la manipulación de alimentos son cada vez más altos, especialistas en el tema consideran que todavía falta un largo camino por recorrer.
Según reconocen los expertos, desde hace aproximadamente seis años los jerarcas de empresas, hoteles y restaurantes se están dando cuenta de la importancia que tiene la sanitización y la desinfección, ya que la contaminación no sólo puede provocar la muerte de las personas sino el cierre de los negocios.
Olger Mendoza, Presidente de Lemen, ha notado un cambio positivo en el tema de la limpieza. Él afirma que los costarricenses se preocupan cada vez más por el aseo de las instalaciones en las que trabajan y por obtener productos que les permitan reducir la contaminación.
Para Mendoza la preocupación por el aseo es un asunto cultural. "A medida que transcurren los años, las personas tienen más acceso a la información, se crea una conciencia entre ellas y se produce un cambio. La gente se vuelve más exigente y pide calidad".
Nixon Delgado, Gerente de Ventas Industriales para Centroamérica de Copamex, considera que es necesario ver a la limpieza como parte del servicio que se le brinda al cliente.
"Debido a la entrada de cadenas internacionales de comida con altos estándares de calidad, muchas empresas costarricenses se han visto en la necesidad de mantener políticas de aseo similares para poder competir".
Mientras que Raúl Campos, Gerente de Ventas de la línea institucional de Kimberly Clark, explica que debido a las exigencias del mercado, las empresas se han dedicado a fabricar productos que intentan reducir cada vez más la contaminación.
El gerente de ventas de la línea institucional de Kimberly Clark también destaca la necesidad de seguir altos estándares de calidad y usar sistemas eficientes que eviten la contaminación cruzada, es decir, aquella que se da por ejemplo si una persona no se lava bien las manos y luego toca los alimentos o si pica una lechuga con el mismo cuchillo con el que le quitó la piel al pollo.
Mayor Aseo
Para Juan Carlos González, Gerente de la División Institucional para Centroamérica de Ecolab, destaca que un solo caso de intoxicación en un negocio puede dañar seriamente la reputación del lugar, alejar a los clientes y afectar severamente las ganancias.
Lemen:
El sistema Sanor ataca los olores en su origen antes de que nazcan. Los agentes humectantes especiales de Sanor ayudan a los detergentes a penetrar las superficies de inodoros y urinales asegurándose de una limpieza más efectiva, incluso donde no se llega limpiando a mano. El simple sistema alimentador por mecha de Sanor dispensa un fluido no peligroso, totalmente biodegradable. Teléfono: 286-08-68.
Ecolab:
Oasis compac es un sistema integrado de limpieza que presenta una línea completa de productos concentrados desarrollados para satisfacer todas sus necesidades de limpieza. Los dosificadores compactos ahorran espacio y permiten una instalación flexible en diversos ambientes de trabajo. Además las fórmulas concentradas de alto rendimiento producen hasta cinco veces más de producto listo para usar, que los limpiadores comunes. Teléfono: 438-16-82.
Kimberly Clark:
Las toallas Kleenex Scottfold están diseñadas para una dispensación superior. El relieve acolchado aumenta la preferencia de los usuarios por su apariencia, sensación y desempeño. Fabricadas para ser más resistentes en los puntos que usualmente otras toallas se romperían al momento de la dispensación. Además, con el uso de estas toallas se controla los costos totales (Mantenimiento, desperdicio y costos de material). Teléfono: 298-31-37.
Sin contaminación
Aunque parezca difícil de creer existen procedimientos simples que se pueden poner en práctica en cada una de las áreas por las que atraviesan los alimentos y que podrían evitar la contaminación.
1. Limpieza y saneamiento: Después de cada uso es importante lavar, enjuagar y sanear todas las superficies que entran en contacto con los alimentos, incluyendo las tablas de cortar, los mostradores y las mesas. Todos los platos y utensilios también deben seguir ese procedimiento ya sea manualmente o en el lavavajillas. Deje secar al aire todos los objetos y no use toallas para secarlos.
2. Higiene de los empleados: Las manos son las principales portadoras de bacterias, esa es la razón por la cual todos los funcionarios deben lavarse y sanearse las manos antes de trabajar, después de usar el baño, de estornudar o toser, de manejar productos crudos, de tomar un descanso, fumar, comer o tirar la basura, etc. Use agua caliente, enjabónese muy bien las manos, enjuáguese y séquese con toallas desechables.
3. Temperaturas de cocción: Cocinar los alimentos a la temperatura adecuada es una de las medidas más importantes que se pueden poner en práctica para tener alimentos seguros. Por ejemplo para aves de74°C / 165°F, para el cerdo -66°C/150°F, para la carne bovina -54°C/130°F y para todo lo demás es conveniente cocinar en -60°C/140°F. Para calentar de nuevo la comida debe hacerse a 74°C/165°F. Es conveniente utilizar un termómetro y lavarlo y sanearlo antes de usarlo de nuevo.
4. Cómo servir alimentos preservando su seguridad: El comedor es el principal lugar donde los clientes juzgan las condiciones de limpieza e higiene de un establecimiento. Como la primera impresión es muy importante es fundamental mantener esa área limpia e higiénica, no sólo para mantener la calidad de los alimentos sino por razones económicas. Asegúrese que los platos, los cubiertos y los demás objetos estén siempre impecables.
Nota elaborada con información suministrada por Ecolab.