La Organización Nacional de Personas con Discapacidades recientemente reportó que uno de cada 5 norteamericanos sufre una discapacidad. Esto tiene un profundo efecto en nuestra sociedad, tocando áreas tan amplias y diversas como empleo, actividades comunales, eventos sociales, y por supuesto en lo relativo a viajes.
En este sentido, hoteles como el Hampton Inn & Suites en nuestro país, ofrecen habitaciones diseñadas especialmente para esta población.
Normalmente, las instalaciones comunes no se acomodan bien a las necesidades de este tipo de huésped. Las siete habitaciones para personas con discapacidad del Hampton Inn & Suites poseen el tamaño de una suite, aunque su precio es de una habitación normal. En casos de personas no videntes se les permite ingresar con el perro lazarillo. La altura de las camas le permite acercarse con mayor facilidad. Las habitaciones poseen una puerta que conecta con otra habitación en caso de que vengan acompañados por alguien que los asista. Las alarmas son audibles y visuales. En las puertas hay identificación braille y poseen dos mirillas una a altura estándar y otra a la altura de una persona en silla de ruedas. Estos y otros detalles dispuestos en un ambiente confortable que le permite al huésped movilizarse sin ningún problema.
Preocuparse por la comodidad de las personas con discapacidad no es una simple moda, sino un derecho de esta población y un deber de quienes ofrecen los servicios.
Algunas habitaciones del Hotel Hampton Inn & Suites, fueron diseñadas con adaptaciones especiales para clientes con limitaciones físicas. Los baños son equipados con agarraderas, sillas o tina dependiendo del tipo de discapacidad.
