La Cámara de Turismo de Guanacaste hizo público su compromiso para desestimular y sancionar la explotación sexual comercial, al suscribir el Código de Conducta para la protección de niñas, niños y adolescentes contra la explotación sexual comercial asociada a viajes y turismo, proyecto ejecutado por la Fundación Paniamor, la Asociación Costarricense de Operadores de Turismo ACOT, la Asociación Costarricense de Profesionales en Turismo ACOPROT y Visión Mundial Costa Rica, con el apoyo financiero de Fundecooperación.
Al suscribir el Código de Conducta, la Cámara de Turismo de Guanacaste (CATURGUA), instará a sus afiliados para que incorporen dentro de sus prácticas un conjunto de normas y principios para enfrentar la explotación sexual comercial desde el lugar de trabajo, capaciten al personal para prevenir y denunciar esta problemática, coloquen símbolos externos que informen sobre su política ética a sus clientes y proveedores, introduzcan una cláusula en los contratos con clientes y proveedores sobre la política de no tolerancia y presenten un informe anual que contenga las acciones realizadas en la temática.
La explotación sexual comercial de niñas, niños y adolescentes asociada a viajes y turismo es un negocio que genera mucho dinero para las redes nacionales e internacionales involucradas, eso hace que el apoyo de las Cámaras y la industria turística en general sea fundamental para combatir este segmento de la demanda, expresó Milena Grillo, Directora Ejecutiva de Paniamor.
La explotación sexual comercial, incluyendo el tráfico y trata, constituye el tercer negocio más lucrativo del mundo, después del tráfico ilícito de drogas y de armas, según datos de la Organización de las Naciones Unidas (ONU).
El proyecto del Código de Conducta en nuestro país inició en agosto del 2003 y se desarrolla en cuatro regiones del país Gran Área Metropolitana, Limón, Puntarenas y Guanacaste– en las que se concentra la mayor infraestructura turística y, por ende, una mayor afluencia de turismo que conlleva un incremento de las posibilidades de ocurrencia de situaciones de explotación sexual comercial de personas menores de edad, asociadas a esta actividad.
La iniciativa del Código de Conducta permite incorporar la acción articulada de hoteles, operadores de turismo, agencias de viajes, agencias de renta de autos, taxis que sirven en el aeropuerto, personal de cruceros y otros actores clave como instancias públicas competentes, en la modificación de los factores que propician la explotación sexual comercial de personas menores de edad en viajes y turismo.
