La llegada del máximo gerarca de la Iglesia Católica, Benedicto XVI, a México no sólo alienta a los creyentes, sino también trae esperanza para los hoteleros, quienes confían en que el líder atraerá clientes a un país abatido por la violencia.
En conferencia de prensa, la Conferencia del Episcopado Mexicano anunció la agenda de cuatro días que tendrá el Papa en México.
El programa abre con el arribo del Papa Benedicto XVI al Aeropuerto de León, Guanajuato, el viernes 23 de marzo.
El sábado 24 sostendrá una reunión con el Presidente Calderón en la sede de la representación del gobierno de Guanajuato.
El domingo 25 encabezará la misa masiva en el Parque Bicentenario en Silao, Guanajuato, y el lunes 26 saldrá del Aeropuerto de León hacia Santiago de Cuba.
El alcalde de León, Ricardo Sheffield Padilla, resalta el esfuerzo de la ciudad por posicionarse en el turismo de grupo, y recomienda a quienes aún no tienen reservaciones para la visita papal o no tengan recursos para acceder al servicio de hotelería, asistir con tiempo; seis o siete horas antes del recorrido de Benedicto XVI, para luego regresar a dormir al hogar o, dado el caso, optar por los espacios para acampado. Los hoteles de León se encuentran a 100% de su capacidad, para hospedar a unos 50 mil visitantes, por lo que los hoteles de las ciudades cercanas están recibiendo también reservaciones.
