Durante los primeros cuatro meses de este año, hubo 132 muertes en la vía pública, de las que, 29 fueron por motivos de alcohol.
La Reforma Parcial de la Ley de Tránsito por Vías Públicas Terrestres No. 7.331 (expediente No. 16.496), que se encuentra en estudio en la Asamblea Legislativa, pretende crear una conciencia en el conductor sobre las consecuencias de su comportamiento inseguro en las carreteras.
Proyecto con multas de rigor
La reforma la presentó la Ministra de Obras Públicas y Transportes, Karla González Carvajal, el 14 de diciembre del 2006.
Busca la aplicación de normas más rigurosas que establezcan una sanción económica para el ciudadano irresponsable.
En el caso del consumo de alcohol, con la reforma al artículo 131 de la actual Ley de Tránsito se cobraría a los choferes en estado de preebriedad, una multa del 95% de un salario base mensual del oficinista, es decir, este salario asciende a ¢161.114, por lo que la multa sería de ¢153.000.
Círculo perverso del alcohol
Roy Rojas, Presidente Ejecutivo del Consejo de Seguridad Vial (COSEVI), manifestó que los locales que expenden licor tan sólo tienen una responsabilidad ética, con respecto al consumo de bebidas alcohólicas de sus clientes. Sin embargo, si de verdad desean cuidarlos, como él mismo afirmó, evitarán que éstos dejen el local en estado de ebriedad.
A ningún comerciante le sirve que su cliente pueda morir en la calle y matar a otros si sale ebrio, esto es un círculo perverso, comentó Rojas.
Otro motivo que Rojas señaló por el que los locales deben controlar el consumo de alcohol es por la tranquilidad de la clientela interna. Las personas ebrias causan problemas,
en ocasiones se ponen violentas o necias y eso molesta a los demás clientes.
Esteban Castro, Gerente General del restaurante El Pollo Cervecero, coincidió que la responsabilidad del local es solo ética, pero que podría convertirse en legal. Por ejemplo, nosotros tenemos la política de que, cuando el bartender ve que el cliente comienza a caer en estado de ebriedad, no se le vende más, así sea que salga disgustado del restaurante.
Castro comentó que, aún cuando evitan que el cliente se emborrache, si el mesero nota que no está en condiciones óptimas de salir, es su responsabilidad preguntarle cómo se va a ir, llamarle un taxi o, en algunos casos y si es tarde, el mismo mesero lo lleva a su casa.
La calle se ha vuelto muy peligrosa y el alcohol es un motivo fuerte. Apoyo que este nuevo proyecto busque multar con un monto tan alto al chofer ebrio, a ver si así le duele de verdad, las cervezas de más que se tomó.
Responsabilidad propia
Gerardo Lizano, Gerente de Recursos Humanos y Corporativos de Holtermann y Compañía, reiteró que, antes que cualquier campaña o ley, la responsabilidad está en cada persona.
La compañía tiene en este momento la campaña de No le dejes toda la responsabilidad a tu ángel guardián, donde apelamos a la conciencia de cada uno.
Pese a que apoyó una eventual reforma de la Ley de Tránsito e, inclusive, avaló la implementación de otras leyes, recalcó que el consumo responsable es el eje central para disminuir los accidentes de tránsito por motivos de alcohol. Los patrones de consumo se obtienen con educación y el cambio final está en cada uno.