Hace 16 años Denis Roy llegó a Costa Rica para imponer un estilo diferente en hotelería.
Su más reciente capricho es el Palacio Zephyr, un lugar con características únicas en nuestro país. Hace más de 16 años, este francés tuvo la visión de hacer una propuesta diferenciada, buscando cautivar clientes de alta categoría. Fue así como nació Villa Caletas, un hotel boutique de lujo, cuyo estilo arquitectónico es definido por su propietario como tropical victoriano, mezclado con neo-clásico.
Recientemente, Denis Roy, quien no descansa en la aventura de crear nuevas propuestas, inauguró el Palacio Zephyr, un sitio inspirado en las grandes casas de fiestas de la Europa del siglo pasado.
El lugar está completamente equipado para eventos especiales, como lo explica Roy, al indicar que un grupo de amigos puede separar el palacio para una boda o cualquier celebración, y además de utilizar los salones, pueden hospedarse en el palacio, con mucha privacidad, y siempre disfrutando de los servicios del hotel, pero sintiéndose en un lugar completamente diferente.
Queremos ofrecer a nuestros clientes y amigos la posibilidad de vivir un sueño de exclusividad, de gran confort y descubrir una experiencia inolvidable.
El público meta de este lugar, según comentó Roy, es un mercado internacional, pero sobre todo está dirigido a clientes exigentes, con deseos de vivir una experiencia diferente en Costa Rica.
Para Roy, la falta de personal capacitado en la zona y en el país en general, ha sido una dificultad, pero no un inconveniente, pues asegura que en el hotel se ha capacitado la mayor parte sus empleados, y consciente de la importancia de mantener a este recurso humano, frente a la oferta de trabajo en otras zonas, en Villa Caletas, cuentan con un programa de incentivos laborales que reconoce y premia el esfuerzo individual.
Tenemos un incentivo para todo el personal de una bonificación anual que varía de una semana a un mes de salario, dependiendo de sus logros, de su tiempo de laborar con la empresa, y de su motivación. Además, tenemos transporte y alimentación para todos, y en caso del personal de fuera de la zona, hospedaje subvencionado, y el beneficio de una asociación solidarista.
De los proveedores, exige buena reputación, honestidad y puntualidad, elementos que se deben ver reflejados tanto en el servicio a tiempo, como en los productos, los que deben gozar de una calidad constante.
Proyectos de muy largo plazo
Denis Roy asegura que descubrió Costa Rica hace más de 20 años, y fueron muchos los elementos que se confabularon para que este francés decidiera instalarse en nuestro país.
Desde que lo conocí, me gustó por ser un lugar tranquilo, con gente muy agradable, nivel de vida de país moderno y desarrollado, país joven y con un clima muy bueno, y con un respeto por la naturaleza y con grandes variedades de vegetación.
Precisamente, cuando inició la construcción del hotel, ya se había trazado la ruta de la carretera a Puerto Caldera, y consideró que ésta quedaría lista al momento de terminar su edificación, o incluso antes. Sin embargo, el hotel ya ha sido remodelado varias veces, se construyó el Palacio Zephyr, y la carretera continúa en una promesa de campaña de cada nuevo gobierno, por eso ahora que la actual administración retomó este tema, Roy asegura que ya no cree en estos cantos de sirena.
Hace más de 20 años, cuando vine a Costa Rica, el proyecto era muy interesante. Era una esperanza muy valiosa para nuestro futuro y desarrollo. Como Santo Tomás yo creo solo lo que puedo ver y tocar. Creo que el gobierno debería cambiar su visión tan tranquila y pobre y pensar en una Costa Rica en expansión.