Hay muchas formas de atraer clientes desde muy temprano en la mañana, como las promociones especiales, productos novedosos y otros. Pero Román Yuan y Denia Arguello, propietarios del Restaurante Don Wang, lo hacen de manera particular. Ellos promocionan la cultura y costumbre chinas de sus desayunos Dim Sum, también llamados Yam Chao, que se degustan desde tiempos de los emperadores chinos.
Y a pesar que algunos de sus ingredientes como el cerdo son tradicionalmente usados en almuerzo y cena, en estos desayunos son apetecidos, pues la mayoría de platillos están hechos al vapor.
¿Qué es un desayuno Dim Sum?
Arguello cuenta que a pesar de que los emperadores chinos, contaban con cientos de expertos cocineros dedicados exclusivamente a la preparación de manjares nuevos para satisfacer el paladar del Emperador y de sus comensales, cuando probaba el desayuno, apenas si comía un bocado y luego lo devolvía. Fue por eso que optaron por crear nuevas recetas, en porciones más pequeñas, de manera que si era del deleite del emperador, rapidito se iban a la cocina a preparar el platillo en grande.
Miles de miles fueron los platillos que se prepararon de esa forma, por lo que con la caída de los imperios, la costumbre se divulgó a través del pueblo chino y se constituyó en lo que hoy en día se conoce como el Dim Sum, manifestó Arguello.
El Dim Sum es entonces una serie de platillos pequeñitos, la mayoría cocidos al vapor, por lo que su digestión es sumamente liviana. También cuenta con ciertos platillos fritos, y con gran variedad de sopas de arroz y de tallarines de huevo o de sahofan de arroz.
Algunos de los bocadillos que ofrece el restaurante Don Wang en su menú de desayunos son las empanaditas fritas con puerro chino y cerdo, panecillos al vapor rellenos de lechón, empanaditas al vapor con camarón y cerdo, rollos de harina de arroz al vapor con res, empanaditas y la tradicional sopa de arroz.
Hace cinco años, cuando iniciaron la conmemoración de esta tradición, sólo vendían desayunos los fines de semana, pero a petición de sus clientes ahora lo hacen toda la semana.
Tradición y buen servicio
Para complementar la tradición, en Don Wang ofrecen bebidas chinas típicas, como los té de jazmín, wulong, Lai-chi, Pou-lei y el té verde. Además el lugar está acondicionado y decorado de manera que el cliente se sienta como en la China.
El salón principal es sólo el inicio de una decoración sobria pues muy cargado da la idea de un lugar muy popular, manifestó Arguello. Es por eso que para hacer sentir bien a sus comensales, han puesto algunos elementos estratégicos que crean un ambiente agradable y muy representativo de los orientales, así como la música ambiente y el sonido de una catarata ubicada en el centro del restaurante y rodeada de vegetación. Según la propietaria eso es símbolo de la energía positiva que fluye en el lugar.
Además cuentan con un salón para Fondeau y un salón privado, ambos con elementos muy representativos de los chinos.
Según Arguello, todo esto se complementa con un excelente servicio y atención personalizada, para que los clientes se sientan como en casa. Por eso una estrategia es estar al pendiente de quienes siempre piden lo mismo y servirle lo que desea, sin necesidad de que lo haya solicitado, para que se sienta chineado. Además, a los clientes fijos se les saluda por su nombre y al final a todos se les ofrece un dulce. A pesar de los 46 platillos de desayuno, 98 platos fuertes y 32 de fondeau, los platillos se varían constantemente, para ofrecer cosas nuevas. Además, muchos de los ingredientes son traídos de China, pues los de acá son de diferente calidad.
Con todos esos detalles, y la promoción de las costumbres y cultura de la China, Don Wang ha logrado sobresalir y ser hoy uno de los favoritos. A
