{mosimage}Según Alex Jensen, asesor del Ministro de Turismo, hasta ahora nuestro país, no ha tenido una adecuada planificación en cuanto al desarrollo turistico.
Para nadie es un secreto que el sector turismo es uno de los principales dinamizadores de nuestra economía. Sin embargo, falta por mucho por hacer, y el plan del gobierno pretende obtener resultados, dándose las condiciones necesarias, hasta el 2012, cuando se espera haber aumentado la oferta hotelera en 18,192 habitaciones y originado con ello la creación de 50 mil empleos.
¿Qué hace Costa Rica?
En Costa Rica, de acuerdo a las cifras presentadas en el Seminario de Ecoanálisis, el valor agregado del turismo pasó de 3.8 a 5.2% del PIB entre 1992 y el 2004, esto sin contar los amplios efectos de spillover, ni su impacto distributivo en zonas de menor desarrollo relativo del país. De acuerdo a Alex Jensen, Asesor de Ministro de Turismo, esta es una actividad muy transversal, porque toca muchas otras, por lo que su importancia en el crecimiento del país se hace mayor.
Según Jensen, antes de analizar el trabajo que está realizando el gobierno, deben plantearse ciertos aspectos que han limitado su labor en este sector. En primera instancia, el país venía creciendo sin ningún modelo económico específico, con acciones bastante lógicas y espontáneas, pero sin ninguna planeación. Nuestra ventaja hasta ahora ha sido, con respecto a los otros países centroamericanos, nuestra situación sociopolítica. Además, el crecimiento turístico se ha visto concentrado en 3 zonas geográficas: Guanacaste, las llanuras de San Carlos y en el Pacífico Medio.
El Ministerio de Turismo, según Jensen, ha empezado su plan, calculándolo de acuerdo a las expectativas de crecimiento del país para los próximos años. Así, para el 2012, se espera haber aumentado la oferta hotelera en 18,192 habitaciones y originado con ello la creación de 50 mil empleos, lo que implicaría una inversión anual de 4.5% del PIB y duplicar la capacidad de los puertos de entrada y un aumento en los servicios básicos del 40%. Para tener aún mejores resultados, comenta Jensen, se hace necesario conocer bien el comportamiento de los turistas que están tratando de atraer, de acuerdo a su origen, para poder satisfacer las necesidades que ellos tengan.
Por la parte del turismo de negocios, también se planea el inicio de la construcción de un Centro Nacional de Convenciones, el año entrante, gracias a las donaciones efectuadas por el gobierno de Taiwán. Este lugar será de un tamaño medio, con capacidad para unas 2,000 a 3,000 personas y será administrado por alguna empresa privada, vía licitación.
De acuerdo a Thelmo Vargas, Socio Consultor de Ecoanálisis, a partir del quinquenio 1980-1985 y hasta 1995, Costa Rica traía un ritmo muy acelerado de crecimiento del sector turístico, en término de visitantes, probablemente incentivado en parte por los cambios que se realizaron al entrar en vigor la ley de incentivos fiscales, y que fue y sigue siendo incluso mayor que el promedio mundial y el de América, sin embargo, después de 1995 en términos globales este porcentaje de crecimiento decayó notablemente pasando de 12.5% a 6.8%, es decir, casi en un 50%. Ya para el período comprendido entre el 2000-2004, el número de turistas aumentó nuevamente en 7.2%.
De acuerdo a Vargas, la competencia global por la atracción de turistas es alta y las estrategias de cada país se enfocan mucho en dar incentivos o valores agregados a los inversionistas. Para el 2004, del total mundial Asia y el Pacífico fueron los que tuvieron la mayor afluencia con 34 mn, seguido por Europa con 16 mn, América con 11 mn, y Oriente Medio y África con 6 y 2 mn respectivamente.
En cuanto a las tendencias mundiales recientes que están afectando este sector a nivel mundial, se pueden citar el cambio en las monedas (euro vs dólar) y las enfermedades, como el SARS, que afectan el movimiento de turistas, los temores al terrorismo y conflictos bélicos que favorecen las estadías o viajes cortos. Otra tendencia importante es la recuperación mundial que facilita la recuperación del turismo de negocios. Las economías emergentes y el dinamismo chino constituyen un impulso adicional. La expansión de aerolíneas de bajo costo y reservas vía internet va en aumento y con esto el aumento en la frecuencia de las vacaciones, estancias más cortas, viaje por cuenta propia y sensibilidad a los precios.