El sector turismo dominicano se preparó para evitar que el huracán Irene causara mayores estragos en las zonas turísticas a su paso por las zonas este y norte de República dominicana. Miles de turistas de los principales polos turísticos, especialmente los de Puerto Plata, fueran recluidos en sus respectivos hoteles.
En el resort turístico de Punta Cana los hoteles tuvieron que cerrar sus playas y los clientes tuvieron que permanecer dentro de los edificios, en sus habitaciones o en otros lugares seguros, siguiendo el protocolo de seguridad establecido, mientras que los aeropuertos Punta Cana y La Romana fueron cerrados.
La Asociación Nacional de Hoteles y Restaurantes de República Dominicana, en la zona de Bávaro-Punta Cana la ocupación hotelera era del 70% esta semana, y las comidas se suministraron en las habitaciones para evitar que los huéspedes se desplazaran a los restaurantes.
República Dominicana ha recibido en los primeros ocho meses de este año cerca de tres millones de turistas y se espera que supere los cinco millones al concluir el 2011, situación por la que el Ministerio de Turismo y los hoteleros asociados en ASONAHORES han informado que no descuidan el más mínimo detalle para que no se afecte a los turistas y con ello, el turismo en sentido general, que es la principal fuente de la economía dominicana.
Fuente: puertoplatadigital