Estudios mundiales de Grupo Calvo proyectan a Costa Rica en una nueva normalidad de consumo
Luego de que se mostrara un alto consumo en alimentos de primera necesidad, como el atún, con registros de hasta un 50% más del normal, al inicio de la crisis; en este momento, cuando la primera ola del virus está pasando, se observa una leve reducción en las ventas del sector atunero a nivel de retail.
En Costa Rica, la disminución de las ventas en supermercados y pequeño formato (pulperías y minisúper) ha variado entre un 5% y 10% acumulado, en el mes de abril, situación que igualmente se ha vivido en los países impactados por la pandemia y que ya se encuentran reactivando sus economías.
Estas estimaciones calzan con las tendencias de consumo que se han desarrollado a nivel mundial, por causa de la pandemia por COVID-19, ya que es un patrón que se ha venido reproduciendo y del que Costa Rica no se escapa, así como el resto de la región y países como Colombia.
Según Víctor Pérez, Director de Negocios Regional de Grupo Calvo, la situación de consumo ha sido estudiada a detalle por la empresa, ya que al tener presencia en 75 países a nivel global y 17 en la región, han estado monitoreando varios de estos modelos de consumo, que se han salido de las estimaciones que se habían proyectado para este año.
“La pandemia por COVID-19 ha sido un nuevo comenzar para todos, ya que todo hemos tenido que ajustarnos a parámetros de consumo y producción muy diferentes a los que en un inicio se hubiera proyectado para este año. Sin embargo, nuestro liderazgo a nivel mundial nos ha hecho tener una capacidad de respuesta muy rápida y de ahí, que pudiéramos medir los comportamientos conforme se iban desarrollando en Europa y, por ende, que en cualquier momento iban a llegar a esta región; por lo que ya estábamos preparados”, comentó Pérez.
El atún es uno de los alimentos de primera necesidad que se consume con mayor intensidad en momentos de crisis y por eso desde un inicio la empresa confirmó el abastecimiento del producto en todos los países donde opera, lo cual, ha traído confianza a los consumidores y a los Gobiernos, quienes también han solicitado producto para las ayudas sociales que se brindan.
“Sabemos que en pocas semanas volveremos a una nueva normalidad, ya que definitivamente habrá ajustes en las formas de comprar, de consumir y en algunos hábitos de vida de la gente, situación a que las empresas como Calvo también nos tendremos que ajustar, para seguir llevando nuestro producto de una forma inocua y con la calidad de siempre”, mencionó el director de negocios de la empresa.
La planta ubicada en El Salvador y que abastece a Costa Rica y la región, se encuentra trabajando al máximo de su capacidad, ya que, pese a que las economías se han contraído por la crisis, este alimento es clave en las casas por sus bondades alimenticias, practicidad y duración.